15/7/07

No se olvida



Dos marchas, un mitin en plaza pública, una reunión con ejidatarios, una asamblea nacional, un par de volanteos, y muchas sesiones ordinarias y extraordinarias del comité. De eso se conforma mi historial como revolucionario. He hecho tan poco.
Mis días consisten, o al menos los últimos, en levantarme de la cama, vestirme, sentarme a escribir, cambiarme, desayunar/comer, tomar el metro, leer la biografía del Che, trabajar diez horas rodeado de gente que pertenece a un grupo social que una vez admiré, por su lucha y su actividad política, pero ahora, al contactarlos, al conocerlos, me he dado cuenta que la mayoría son vacíos, secos del cerebro, faltos de ideas propias, preocupados por banalidades, sin saber ni apreciar, ni practicar, dicho sea de paso, lo que sus dirigentes una vez lograron, y haciendo todo lo contrario a lo que intentaron predicar, discriminando, haciendo a un lado, ignorando a otros grupos minoritarios. Prosiguiendo con mi rutina: termino de trabajar como a las 10 y media u once, me dirijo otra vez al metro, otra vez leo la vida del Che, llego a mi casa, como/ceno, leo El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha de Cervantes -unas tres o cuatro páginas por sesión-, o si no toco la guitarra para no perder la práctica, no me da tiempo de hacer las dos, y me acuesto en la cama, dispuesto a empaparme de amor para dormir tranquilo. Los días de descanso salimos, vamos a algún museo, a la cineteca, visitamos a alguien, compramos la despensa, ese es el único que varía. Si no aprovecho, al menos vivo 15 ó 16 horas al día. Todavía duermo bien.
Pero siento la angustia ahogándome. Siento la necesidad imperiosa de utilizar mi tiempo en lo que antes lo usaba, en lo que antes agotaba mis energías, físicas, intelectuales y monetarias. Todos los días recuerdo que este país, esta sociedad está condenada a cambiar para no perecer. Cada día veo la injusticia, le desigualdad, la ignorancia, la pobreza extrema, y la rabia me invade. No estoy al día con lo que pasa en el mundo, mis actualizaciones se limitan a las primeras planas que leo en los puestos de periódicos, y la mayoría consisten en "¡Mató a la nuera!" o "¡Partido en dos!", pero sé que las cosas no pueden andar bien, porque no se ve en las calles. Porque la política sigue siendo, como siempre, un ranking de popularidad, porque, por más bonita y moderna que se vea la ciudad, no significa que haya un avance o un progreso. Acá, en los lados feos, todo está igual, los desempleados siguen sin empleo, los desnutridos siguen sin comer, los analfabetos siguen sin ir a la escuela. Eso es lo que más me preocupa, la educación. Estoy convencido que un proceso revolucionario no puede llevarse a cabo sin la participación popular, y ésta no puede accionarse sino en personas con un nivel de educación medio. Con gente que sepa un poquito de economía, de política, de sociología. Y me gustaría hacer eso, en mis ratos libres -que son de por sí pocos-, participar en campañas voluntarias de educación, y hacer algo por mi país.
No me siento patriota. No siento que este sea un país que yo deba defender con la vida, pero sí lo haría por las personas. Ellas no son las culpables de su ignorancia, sino este sistema horrible, esta tríada gobierno-iglesia-medios de comunicación, esos son los que chingan la nación. Más los últimos, embobando, durmiendo conciencias, volviéndolos adictos a dramas insensibles, a juegos sin motivo, a noticias que desinforman. Sé que cuando entre a la UAM podré sumarme a algún grupito de rebeldes que encuentre por ahí, que sí los hay, y organizarme con ellos para armar un documental sobre la pobre educación de los mexicanos, o una jornada de educación, o un taller de lectura y redacción... Tantas cosas. Por eso no puedo esperar para entrar a la escuela. Por eso, y porque estoy ávido de aprender acerca del hombre y sus sociedades. Pero ya cada día falta menos, ese es mi único consuelo.

"Si mi sangre pide, mi sangre le doy/ por los habitantes de nuestra nación"

1 comentario:

  1. *Hay muchas cosas por hacer y nunca seran las suficientes.

    *Te invito a mi nuevo blog, jaja, que raro que tenga un nuevo blog no?.
    http://n-e-u-r-o-n-a.blogspot.com/

    ResponderBorrar

¡Gracias por tus comentarios!